La noticia de que Telefónica podría plantear un ERE para entre 4.000 y 5.000 empleados en la segunda mitad de este año se podía leer ayer en la práctica totalidad de medios digitales aunque desde la dirección de la compañía el silencio era absoluto y, por su parte, los sindicatos aseguraron que no habían sido informados y esperarían a la revisión estratégica de la teleco.
El presidente de la operadora, Marc Murtra, evitó pronunciarse sobre este asunto laboral que tendría como objetivo reducir los costes de estructura del grupo y mejorar su eficiencia y, tras ser preguntado, defendió la creación de «campeones tecnológicos» europeos para competir con Estados Unidos y China.
Murtra reclamó una mayor concentración en los sectores tecnológicos y puso como ejemplo que, mientras que en EEUU, China, Japón o la India hay tres operadoras de telefonía, en Europa hay 41, lo que afecta a la calidad de la red, los servicios y la capacidad de crear nuevas tecnologías.
El máximo ejecutivo de la multinacional lamentó que la fragmentación actual «no permite la escala» para desarrollar, desplegar y mantener nuevas innovaciones tecnológicas. Por ello, defendió la necesidad de crear «campeones tecnológicos» europeos a través de la consolidación entre empresas, algo que, según explicó, permitiría la creación de tecnologías propias.
En este sentido, reconoció que estas concentraciones comportarían ciertos costes, pero que el agregado sería positivo en creación de tecnología y conocimiento.
Nada adelantó sobre el posible ajuste, que se llevaría a cabo, según los medios, mediante un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en la línea del acordado con los sindicatos en 2024 y que supuso la salida de 3.421 trabajadores, bajo el mandato de su predecesor en el cargo, José María Álvarez?Pallete.
Por su parte, los sindicatos mayoritarios en Telefónica (UGT, CCOO y Sumados-Fetico) aseguraron no haber recibido ningún tipo de información oficial sobre la posibilidad de que la compañía esté trabajando o se plantee ejecutar un nuevo ERE, según fuentes de las tres organizaciones, que tampoco descartaron la opción y se mantienen a la espera de que la teleco desvele su nuevo Plan Estratégico que se presentará en el segundo semestre.
UGT subrayó en relación a las noticias relacionadas con un posible nuevo ERE en Telefónica, que consideraría «inaceptable que la sostenibilidad empresarial se proyectase nuevamente únicamente desde la óptica de los recortes de plantilla».
Convenio hasta 2026
Tras la información publicada por los medios sobre el posible ajuste, UGT difundió un comunicado en el que señaló que «la llegada de Marc Murtra a la Presidencia del grupo y la entrada del Gobierno de España a su accionariado deben suponer una oportunidad para renovar compromisos y reforzar la posición estratégica de la plantilla, no para convertirla en variable de ajuste».
UGT recordó que el III Convenio Colectivo de Empresas Vinculadas (CEV) «blinda las garantías laborales de la plantilla hasta el 31 de diciembre de 2026», lo cual incluye el compromiso de que «cualquier medida de ajuste deberá contar con el respaldo sindical».
Por tanto, ningún proceso de estas características puede iniciarse ni avanzar sin el concurso y aprobación de las fuerzas sociales, añadió el sindicato.